Diario La Realidad Saharaui/DLRS, martes 27 de octubre 2020
ARTÍCULO DE OPINIÓN
Foto: ZCH. Traducción redacción DLRS
Sáhara Occidental: la paciencia tiene sus límites / Yahya Ahmadou, escritor y diplomático saharaui. Artículo publicado en la prensa mauritana, Zahraa Chenguetti ayer lunes 26 de octubre.
Continúa el cierre de la brecha
ilegal en El Guerguerat abierta en 2001 por Marruecos fuera de las cláusulas
del acuerdo nº 1 de cese el fuego, en la región sur del Sáhara Occidental. Este
cierre provocó muchas reacciones y un renovado interés en la región y en el
mundo por el conflicto del Sáhara Occidental, que ha sido olvidado en los
pasillos del Consejo de Seguridad durante tres décadas.
Es cierto que el mundo ha sido
testigo durante el mismo período de muchos focos peligrosos y explosivos que el
Consejo de Seguridad considera "más urgentes" que la cuestión del
Sáhara Occidental. A pesar de todo el Secretario General de las Naciones Unidas
ha vuelto a presentar al Consejo de Seguridad como cada año su informe sobre el
Sahara Occidental con la afirmación: "La situación en el Sáhara Occidental
se caracteriza por una completa calma durante este período”.
Los saharauis que lucharon contra
Marruecos durante más de una década en una feroz guerra en la que Marruecos aseguró
que no podría ganarla para dominar el Sahara Occidental militarmente, por lo
que optó en busca de una solución pacífica y reconoció al Frente Popular para
la Liberación de Saguia El Hamra y Río de Oro, Frente Polisario, como único
representante legítimo del pueblo saharaui y firmó con él en 1991 acuerdos de
alto el fuego bajo la supervisión de las Naciones Unidas y la Organización de
la Unidad Africana. Así comenzó el proceso de paz, que se esperaba que
culminara un año después con un referéndum bajo los auspicios de las Naciones
Unidas y que garantizaría al pueblo saharaui su derecho a la autodeterminación.
Después de años de recorrer este
camino e identificar a ochenta mil saharauis como votantes potenciales para el
referéndum surgió en Marruecos una nueva administración bajo el trono del
actual rey que poco a poco comenzó a incumplir los compromisos firmados por su
antecesor, en una clara ruptura que en ocasiones se manifiesta en su desafío a
la misión internacional, MINURSO, que se encontró sin ningún papel sobre el
terreno, salvo el de proteger los intereses de Marruecos y proporcionarle en bandeja
de plata lo que no pudo lograr en el campo de batalla durante los años de
guerra.
La parte saharaui mantuvo una
postura de mucha moderación y de intentos de reconducir el camino y salvar el proceso,
aunque Marruecos no ha logrado sus objetivos de ocupación al Sáhara Occidental:
1. -Dominar como le plazca el territorio bajo su control, la condena a los órganos de derechos humanos no le inquietó porque Francia lo protege ...
2. -Los recursos naturales del Sáhara Occidental los saquean sin miedo, a pesar de las reiteradas sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, y es porque Francia lo protege.
3. -Con la apertura de la brecha ilegal de exportación terrestre, que actualmente aporta alrededor del 15% de la renta nacional marroquí, situación actual que se ha convertido en la cúspide de lo que soñaba en sus objetivos de ocupación al territorio saharaui.
Y en cuanto a la misión de la ONU,
para la celebración del referéndum de la autodeterminación en el Sahara
Occidental, MINURSO, se ha convertido en una mera misión policial que está para
regular el tránsito en la ilegal brecha de El Guerguerat y solo reacciona
cuando se ven afectados los intereses de Marruecos, y no ante el sollozo de las
mujeres saharauis que son expuestas a la opresión en las calles de El Aaiún, ni
ante la apertura de consulados en un territorio en conflicto, ni ante el
rechazo a la visita de altos funcionarios de la ONU a la ciudad de El Aaiun en los
territorios ocupados, ni ante la expulsión de cualquiera que intente arrojar luz sobre lo
que sucede en el territorio. Para acentuar el fracaso de la ONU, transcurre más
de un año sin que el Secretario General asigne un representante especial para
el Sahara Occidental tras la renuncia del expresidente alemán. Tarea para la
que aún no ha encontrado una figura internacional equilibrada que acepte el
cargo.
Por otro lado, los saharauis llevan
casi cinco décadas viviendo en el exilio en condiciones muy difíciles, aunque
mejores que los otros saharauis que viven bajo ocupación en condiciones muy adversas.
Las zonas ocupadas se han visto inundadas de drogas, delincuencia, opresión,
abusos y detenciones, y actualmente en las cárceles marroquíes languidecen grupos
de destacados militantes saharauis por el mero hecho de expresar su rechazo a
la ocupación marroquí.
Todos deben saber que esta
situación ya no es sostenible, y a Marruecos y su valedor les corresponde
avanzar en el proceso de paz internacional que debe culminar con el referéndum de
autodeterminación del pueblo saharaui, que pide Naciones Unidas. Así todos los
pueblos de la región encontrarán la libertad y avanzarán hacia una integración
real y fructífera con la construcción de un desarrollo integral de la región
que no sea a costa de sus pueblos. Y entender que el éxito de los grandes
bloques políticos del mundo se ha logrado por sus políticas de cooperación, la
buena vecindad y el respeto mutuo.
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